Lo puedes preparar en versión pastel con una base de bizcocho o galleta, o lo puedes prearar en versióm tarta con un pure de calabaza.
Si te gustan las especias, puedes añadirle algunas a tu gusto. Las más típicas son la canela, el jengibre, el clave, la nuez moscada y la pimienta.
Tienes que limpiar y pelar la calabaza, y cortarla en cubos del mismo tamaño. Puedes cocinarla al microondas tapada con papel film o en el horno. Una vez cocida, puedes chafarla de manera manual o con batidora.
Una vez cocinada la calabaza, déjala enfriar antes de elaborar el postre.
Si te sobra un poco del puré de calabaza usado para la receta, puedes hacer una mermelada de calabaza.
Para guardarla puedes congelarla en porciones para tenerlo listo en cualquier momento.
Puedes decorar tus postres de calabaza con sus propias semillas o con otras especias como canela.
Si usas calabaza fresca, cuando la selecciones, busca una que se sienta pesada y firme al tacto. La superficie de la calabaza no debe tener magulladuras ni cortes.
Para manipular la calabaza más fácilmente, córtala por la mitad y quítale todas las semillas.