Flan de café

Flan de café
Receta de La Lechera
Postres en 5 minutos
Haz clic sobre las estrellas y puntúa esta receta Mejor en otro momento

59

votos
Fácil 6-8
personas
5 min.
de preparación
40 min.
de cocción

Qué me aporta esta receta...

El café es una de las bebidas favoritas de los españoles. Nos gusta tomarlo en el desayuno, a media mañana, después de comer, por la tarde... ¿Y si pudieras convertirlo en un postre delicioso? Este flan de café es una forma diferente y muy refrescante de disfrutar de toda la intensidad de su aroma y su sabor, apreciado por paladares de todo el mundo.

¿Qué necesitas para preparar este flan de café casero y leche condensada? Además de estar riquísimos, los flanes son una receta ideal para cuando quieres improvisar un buen postre con ingredientes que siempre sueles tener a mano en casa. En general, todas las recetas tradicionales de flan de huevo utilizan como ingredientes principales huevos, leche y azúcar, que podemos sustituir por leche condensada para darle un toque más cremoso.

A partir de esta receta básica podemos crear infinidad de variantes, añadiendo ingredientes para aromatizar y dar sabor. Para este flan de café y leche condensada utilizaremos café soluble, lo que, además de convertirlo en un bocado irresistible, también brindará a este postre un bonito color tostado, para hacerlo todavía más apetecible a la vista.

Además de su sabor, esta receta de flan de café con leche condensada también destaca por su rapidez. Prepararlo te llevará solo cinco minutos y luego podrás dejar que el horno trabaje por ti. ¿Qué más razones necesitas para probarlo? No dudes en preparar en casa nuestra receta de flan de café y leche condensada. ¡Para chuparse los dedos! Además, Nestlé Cocina te ofrece todos los trucos.

Si buscas postres ligeros y fáciles para refrescarte este verano, con este flan de café conseguirás hacer las delicias de todos los que no pueden concebir el final de una buena comida sin una taza de esta bebida, además de contentar a los paladares más golosos.

En esta receta te hemos propuesto utilizar Nescafé soluble, pero también puedes añadir un chorrito de licor de café o licor de naranja para aromatizar. Tú decides cómo elaborar este flan de café con leche condensada. Además del café clásico, la gama Nescafé también ofrece variedades que funcionarán muy bien en esta receta, como Nescafé Black Roast, fantástica si quieres darle a tu flan de café un sabor más intenso, o variedades descafeinadas, muy recomendables si hay niños entre los comensales y no quieres que este delicioso postre les quite el sueño.

¿Quieres algunos consejos para asegurarte el éxito? Después de mezclar los ingredientes, el último paso para preparar cualquier flan de huevo casero, como este flan de café y leche condensada, es la cocción al baño María, normalmente en el horno aunque también existen recetas de flanes exprés que podemos preparar en el microondas. Algunos hornos modernos también ofrecen la opción de cocinar al vapor, sin necesidad de utilizar el baño María.

¿Eres principiante y desconoces esta técnica? Pues te recomendamos que tomes buena nota de la siguiente explicación, porque aprenderla te será útil para cocinar infinidad de recetas, como este flan de café con leche condensada. A grandes rasgos, el baño María es una técnica que permite cocinar los alimentos aprovechando el calor del agua. De esta forma, garantizamos que la temperatura se distribuye de forma uniforme y gradual, hasta llegar al punto de cocción perfecto.

Para hornear tu flan de café al baño María, solo necesitas introducir la flanera en un recipiente de tamaño mayor. Puede ser una fuente de barro, de vidrio templado o metálica, siempre que sea apta para el horno. Después, llena de agua este contenedor hasta cubrir la flanera más o menos hasta la mitad. Si el agua es demasiado escasa, tu flan de café no llegará a cuajar, mientras que si utilizamos demasiada, cuando el agua empiece a hervir puede saltar fácilmente dentro de las flaneras.

Para este flan de café con leche condensada, nuestros expertos reposteros aconsejan hornear a una temperatura de 180ºC durante un máximo de 40 minutos. Si nos pasamos con el tiempo de cocción, corremos el riesgo de que el huevo se coagule y suelte agua, lo que lo hará perder su textura cremosa. Además, es importante tener en cuenta que, una vez fuera del horno, este postre necesita unas horas para terminar de cuajar en la nevera, hasta alcanzar el punto perfecto. Tener paciencia para dejar que se enfríe puede suponer todo un reto pero, ¡te aseguramos que la espera merece la pena!

Descubre más recetas de flanes aquí.